Una mujer sensible, solidaria y profesional

Patricia Álvarez siente la satisfacción de haber trabajado ya para diferentes generaciones durante sus veintiséis años en el mundo del interiorismo, gracias a que su estilo se reinventa y se adapta. Una profesión que le gusta y disfruta desde pequeña, cuando cerraba los ojos e imaginaba una habitación vacía, para llenarla luego de elementos aquí y allá.

Patricia nos recibe en su estudio, un espacio creativo, ambientado con un gusto exquisito, donde fotografías de algunos de sus proyectos forman una hermosa composición que adornan una de las paredes. Desde allí, se puede apreciar un poco más sus trabajos.

De parte de su padre, Ambrosio Álvarez (ya fallecido), así como de su hermano Roberto, Patricia tenía cierta influencia en estudiar leyes; y es que su padre era abogado con especialidad en Derecho Internacional, y su hermano también se inclinó por la carrera de leyes. “Roberto también estudió Derecho. El año pasado publicó un libro y está dedicado al área”.

“Mi tendencia era por lo que yo escuchaba en mi casa siempre; me gustaba participar en las discusiones. Era el ambiente que me gustaba”, refiere, pero al final esto no fue lo que predominó en el momento que decide lo que estudiaría.

Su madre, Eridania Gil (ya fallecida), fue parte integral en su vida, al igual que su otro hermano Gustavo, quien vive actualmente en Punta Cana. Desde pequeña (de nueve a diez años de edad), tenía siempre la tendencia a arreglar, y redecorar; por ejemplo, su habitación, que era, por decirlo así, su área favorita. “Aunque en la casa lo veían como un juego, al final resultó siendo más que eso”.

 

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Autor: Construmedia

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