La bandera de República Dominicana ha sido catalogada como una de las 10 más hermosas del mundo; y es, además, la única bandera que tiene en su centro la Biblia abierta. En honor a ella es precisamente el siguiente monumento: la Plaza de la Bandera, que también rinde un merecido homenaje a la patria.

 

 

La intersección de las avenidas 27 de Febrero y Gregorio Luperón es una de las zonas más transitadas de la capital de República Dominicana. Justo allí se encuentra una edificación emblemática del país: la Plaza de la Bandera, un monumento patriótico que vamos a conocer bien de cerca.

En primera instancia, cabe señalar que originalmente se llamó Plaza de la Independencia tras su inauguración en el año 1978; la misma se construyó durante el gobierno del expresidente Joaquín Balaguer para que sirviera de centro al conjunto de edificios circundantes, entre ellos la Junta Central Electoral, las Fuerzas Armadas, Centro de Importación e Inversión, etcétera.

La Plaza de la Bandera es un espacio público que a menudo alberga grandes concentraciones de personas durante eventos y manifestaciones. ¿Cómo se abordó la planificación de la seguridad y la ingeniería civil para garantizar la estabilidad y la seguridad de la estructura en situaciones de carga máxima? Su artífice, el arquitecto Christian Martínez, nos explica que “la parte de planificación civil, para garantizar la seguridad y la estabilidad de todo el conjunto, se hizo pensando a futuro; y la realizó el ingeniero Horacio Ortega y el ingeniero Rafael Bonelly”.

De hecho, esta popular plaza se presta precisamente para hacer grandes concentraciones de personas, gracias a la naturaleza de su construcción que es totalmente abierta y de fácil acceso por sus diferentes perímetros. Pero cabe señalar que las mismas deben tener un permiso de las autoridades. La Plaza de la Bandera, antes Plaza de la Independencia, está protegida directamente por la Presidencia de la República; y para tomarles fotos, sobre todo con drones, se necesita un permiso especial de la dirección de Asuntos Civiles de las Fuerzas Armadas.

Obra arquitectónica

Como hemos referido, el diseño de la obra fue responsabilidad del arquitecto Christian Martínez, quien se inspiró en una cruz latina para darle forma a la estructura.

El diseño de la Plaza de la Bandera destaca por el uso de materiales y texturas que reflejan la historia y la cultura dominicana. Al compartir algunos detalles sobre la selección de materiales y cómo estos se relacionan con la identidad nacional y la estética de la plaza, Martínez detalla que “sobre el diseño de la obra, se usó mármol dominicano y coralina, también de aquí, pues se requería usar lo más posible materiales criollos; luego, naturalmente, el cemento armado era necesario para la estructura del arco”.

Resalta, además, que “lo que primó en el diseño fue el símbolo, la planta es la cruz de la bandera, el arco es el pacto que en la Biblia, Dios hizo con Noé cuando pasó el diluvio, enviando un arcoíris, por lo tanto, es el pacto sagrado que crea nuestra nacionalidad, creado por Duarte a la posteridad y en el medio, la bandera ondeando cual corazón de la patria”.

Es interesante este detalle, pues a simple vista, quienes visiten la plaza podrán ver el arco, las banderas, las estatuas, entre otras cosas, pero casi siempre pasa desapercibida la base de la estructura que, como se ha mencionado, forma una cruz.

“En la base del arco, un arcángel tiene la espada y el otro un ramo de olivo, o sea, por la guerra o la paz, somos dominicanos. Y al centro del arco, la tumba del soldado desconocido, buscado por mí y mi equipo, cuando estuve de director en el Museo del Hombre Dominicano”, asegura el arquitecto Christian Martínez.

A nivel constructivo, de su arco también cabe señalar una de sus características, y es que el mismo es de tipo arco parabólico, que técnicamente es un tipo de arco como lo indica su nombre: en forma de parábola. En la práctica constructiva, su curva representa un método de reparo de carga muy eficiente, porque que es usado en una gran variedad de formas.

El programa educativo de la Editora Listín Diario, Listín en la Educación Actualizada (Plan LEA) ha compartido en la web varios artículos sobre esta plaza, imposibles de ignorar cuando se transita por las mencionadas avenidas. En uno de sus más recientes, publicados este año, resalta que la Plaza de la Bandera es un monumento patriótico que rinde homenaje a uno de los más importantes símbolos nacionales de la República Dominicana.

“En el perímetro, se muestran numerosos mástiles con banderas de la República Dominicana. En el centro de este monumento a la patria, está el Arco del Triunfo. A sus lados están dos ángeles que representan: la gloria y el honor. Debajo del arco está la gran escultura de Juan de Ávalos, que representa a la “madre patria” que protege y sostiene al soldado caído por defenderla. Debajo del arco se exhibe una enorme bandera dominicana”, resalta Plan LEA.

 

Christian Aníbal Martínez Villanueva

Christian Martínez se ha desempeñado en diversos cargos ligados al ambiente cultural, entre ellos el de agregado cultural dominicano en Italia, director general de parques y director general del Museo del Hombre Dominicano.

Nació el 5 de marzo de 1939 en República Dominicana. Realizó sus estudios de primaria y bachillerato en el Instituto San Juan Bautista de La Salle. Luego viajó a Italia y estudió arquitectura, arte y escenografía.

Este reconocido arquitecto y pintor ha desarrollado, junto a diversos especialistas, proyectos arqueológicos como el Museo de La Caleta. Entre sus obras más relevantes están el Mausoleo Altar de la Patria, la Plaza de la Bandera, el parque Mirador del Sur (Paseo de los Indios) y los jardines del Faro a Colón.

También cabe mencionar la construcción y diseño del Baluarte del Conde y la restauración de la Puerta del Conde, Puerta de la Misericordia y el Parque Independencia de la ciudad de Santo Domingo, primera ciudad de fundación europea en América. La Ciudad Colonial de Santo Domingo y por ende las mencionadas edificaciones han sido declaradas como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Ha publicado diversos escritos y, en el plano académico, ha participado en excavaciones arqueológicas en La Isabela e investigaciones antropológicas sobre la vida y cosmovisión de la cultura taína y los ciguayos.

Motivos renacentistas y figuras propias de la historia de la cultura taína y dominicana en general, caracterizan las obras artísticas de Martínez, quien fue galardonado con el segundo puesto en el III Concurso de Arte Eduardo León Jimenes; como artista también participó en la XLIII Bienal de Venecia en el año 1988.

En el Aeropuerto Internacional Las Américas, la Biblioteca Nacional Pedro Henríquez Ureña, el Museo Gregorio Luperón en Puerto Plata, el Museo de las Telecomunicaciones y las estaciones Hermanas Mirabal, Mamá Tingó y Taínos del Metro de Santo Domingo, se han usado sus murales y paneles suspendidos con pinturas en óleo y acuarela.

 

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Construmedia