TAIPEI 101
Un rascacielos ecológico que resiste terremotos y fuertes vientos. Hace unos años, la redacción de esta revista hizo una edición especial sobre “Megaconstrucciones”, en la que se incluyó a Taipéi 101 por ser una obra maestra de la arquitectura moderna. Nueva vez, hablaremos sobre ella desde otra perspectiva, pues es imposible dejarla a un lado cuando se habla sobre edificios sostenibles, siendo Taipéi 101 un ejemplo a seguir.
Más de 16,000 fuegos artificiales, música, luces y láseres. El 31 de diciembre del año 2022, más de un millón de personas estaban listas para disfrutar de “Cuidando el mundo y sueños resplandecientes”, un espectáculo de tan solo cinco minutos con el que Taipéi 101 dio la bienvenida al 2023.
Una nueva pantalla de malla envolvía los cuatro lados del edificio, la primera multimedia que combina luces, láseres, animaciones y música, y para ello utilizaron tecnología de punta para causar el mínimo impacto al medio ambiente. Y es que esa es la finalidad del edificio, más allá de las celebraciones y espectáculos.
Esta obra, propiedad de Taipéi Financial Center Corporation, es considerada como el edificio verde más alto, mientras que otros lo llaman el rascacielos sostenible de Taipéi; pero amén de los nombres que se le puedan atribuir, la realidad es que la torre está dotada de un sistema de recolección de agua de lluvias que se usa para el servicio sanitario y para regar las áreas verdes, entre otros espacios. Sin duda, Taipéi 101 fue construida con criterios ecológicos que buscan preservar el medio ambiente.
Taipéi 101 conjuga también motivos antiguos e ideas con técnicas y materiales modernos. Tiene 106 plantas, es decir, que cinco de ellas son subterráneas. Su nombre viene dado por una combinación del nombre de la ciudad donde está situado, y por el número de plantas que están por encima del nivel del suelo.
Dada la importancia de este edificio, se han escrito un sinnúmero de artículos destacando sus atributos, pero uno que llamó la atención a esta redacción fue el publicado por ciudadesdelfuturo.es, el 24 agosto, 2016.
En dicho artículo destacan que, para mantener los estándares de sostenibilidad, en los 101 pisos del edificio se instalaron Siemens Navigator, “una plataforma de gestión de la energía y sostenibilidad basada en la nube, que mejora la eficiencia del mismo mediante una gestión inteligente de la energía. Se trata de un servicio integral que abarca: la seguridad del edificio, la protección contra incendios y todos los aspectos relativos a la automatización del mismo”.
¿Cómo? El medio de comunicación lo detalla: “La plataforma aprovecha el Internet de las cosas para obtener datos del rascacielos, que luego se supervisan, recogen y analizan. Esto convierte los datos brutos en información procesable que se puede utilizar para crear estrategias de energía que reducen los costes de operación. Entre otras muchas cosas, la plataforma permite comprobar el consumo de energía, agua y calidad ambiental en tiempo real e identificar y resolver rápidamente potenciales problemas”.
Otras características del edificio
Una de las singulares características de esta torre es el simbolismo que la envuelve. Tan solo por poner un ejemplo, esta estructura en espiral utiliza el Axis mundi: un centro del mundo donde la tierra se une con el cielo y los cuatro puntos cardinales se juntan. En adición, tiene una altura de 101 pisos que sirve para conmemorar la renovación del tiempo: el nuevo siglo que llegó cuando las torres estaban en construcción (100+1).
En la cultura china, el número ocho se asocia con la abundancia, prosperidad y buena fortuna, así que no es casualidad que la torre principal incluya una serie de ocho segmentos de ocho pisos cada uno.
Taipéi 101 simboliza, además, los altos ideales derivados de ir uno más allá del 100, un número tradicionalmente asociado a la perfección. Representa la ubicación en la que el edificio se encuentra: 101 es el código postal del distrito internacional de negocios de Taipéi.
El emblema colocado sobre las entradas de la torre muestra tres monedas de oro de diseño antiguo, con orificios centrales moldeados para representar los números arábigos 1-0-1. Mientras que, como ornamentos, aparecen las figuras curvas Ryuji, un símbolo ancestral asociado con nubes celestiales que evoca a la sanación, protección y plenitud.
Es posible que, con el paso del tiempo, Taipéi 101 baje en la lista de los rascacielos con más altura del mundo, pero es un ejemplo de responsabilidad medioambiental, y sigue batiendo récords en cuanto a eficiencia energética y sostenibilidad.
Certificados de sostenibilidad
Desde su concepción, Taipéi 101 se pensó como un edificio sostenible; gracias a eso, fue el primer edificio del mundo (de su tamaño) en obtener el importante certificado LEED-EBOM Platinum, Líder en Eficiencia Energética y Diseño Sostenible.
Este tipo de certificación LEED es para edificios que obtienen 80 o más puntos en su evaluación y, dicho sea de paso, es la más alta de todas. Las características de la certificación LEED para edificios sostenibles abarca desde su diseño hasta su demolición, considerando el proceso de su ejecución, así como cualquier otra posible intervención en el mismo de reforma o de mantenimiento (de acuerdo a una fuente de Internet).
El objetivo de la certificación es reducir el impacto ambiental de los edificios, y se trata de un tipo de acreditación internacional desarrollada por el US Green Building Council para que los edificios cumplan unos estándares de sostenibilidad.
Taipei 101 consigue tener un ahorro anual de CO2 de 2,995 toneladas, que equivalen a evitar la deforestación de más de cuatro hectáreas de bosques o la conducción de 239 coches al año. El consumo de energía es de 4,8 millones de kWh menos que antes de implementar las medidas exigidas para la obtención del certificado LEED. Y se ahorran 28,000 toneladas métricas de agua, así como 1,261 toneladas métricas de basura al año.
En el caso de Taipéi 101, por ejemplo, son muchas las medidas que se toman y se llevan a cabo para cumplir con los parámetros. La temperatura y la climatización se controlan a través de 3,400 terminales de cajas de control, situadas por todo el edificio. Aprovechando la bajada de temperatura nocturna, este sistema produce hielo y lo almacena para reducir la carga de refrigeración durante el día.
La fuente en línea, también detalla que la iluminación está controlada de manera centralizada por un sistema de automatización desarrollado por Siemens. El consumo de energía de Taipéi 101 es un 30 % inferior a la media de edificios, lo que supone un ahorro del coste de energía anual cerca de 700,000 dólares americanos.
Según datos de la administración de Taipéi 101, que alcanzó un 95.79 por ciento de ocupación a fines de 2015, el edificio ha ahorrado 262 gigavatios/hora en electricidad. Esto equivale a una reducción de 139,083 toneladas de emisiones de carbono, equivalentes a la absorción de carbono total del Parque Forestal Daan por más de 357 años.
“El Sistema de Control y Monitorización de Energía (EMCS, siglas en inglés) agiliza las operaciones y el control de los equipos HVAC en todo el complejo, al optimizar el uso de energía en su totalidad. También incrementan considerablemente la eficiencia del sistema de refrigeración con aplicación de algoritmos mejorados para la planta de refrigeración y el cambio de secuencia de la operación”, menciona como dato interesante la web climanoticias.com.
Esto es posible gracias al mencionado sistema, explica la fuente, así como a través de la modelación de energía, auditorías de energía, servicios de encargo y la instalación de sensores adicionales. La calidad del aire interior cumple ahora con los requisitos principales de LEED.
Por otro lado, el sistema de iluminación Osram comprendía inicialmente 125,000 lámparas fluorescentes, 3,800 bombillas de ahorro energético y 2,400 lámparas halógenas, también controladas todas ellas de manera centralizada por el sistema de automatización del edificio.
Para incrementar el ahorro, interactúan con el sistema de volumen de aire, por lo que cuando la estancia no está habitada, el aire acondicionado y el sistema de iluminación se apagan automáticamente.
Diseño y construcción
El arquitecto de Taipéi 101 es Chu-yuan Lee, un artista y arquitecto taiwanés que nació en Guangdong, República de China. Se graduó en la Universidad Nacional Cheng Kung (Tainan) y obtuvo su maestría en la Universidad de Princeton, Estados Unidos.
Además de dirigir el diseño de Taipéi 101, el rascacielos más alto del mundo en el momento de su finalización, en el año 2004, Lee también ha tenido a su cargo el diseño del Edificio Hung Kuo, Taipéi (1989). Grand 50 Tower, Kaohsiung (el edificio más alto de Taiwán de 1992 a 1993). Far Eastern Plaza I y II, Taipéi, (1994). Tuntex Sky Tower, Kaohsiung (el edificio más alto de Taiwán de 1997 a 2004). Centro de Correos y Telecomunicaciones, Tianjin (1998). Centro de Comercio Internacional de Yuda, Zhengzhou (1999). Mansión Fangyuan, Shenyang (2001); entre otros.
Mientras, Thornton Tomasetti fue la firma a cargo de la parte de ingeniería estructural de Taipéi 101. Fue fundada en el año 1956 y, a la fecha, es una organización de ingenieros, arquitectos y profesionales en áreas afines que colaboran desde diferentes partes del mundo. Thornton Tomasetti ofrece servicios de diseño, investigación y análisis de ingeniería.
Sus obras están por todo el mundo y dan cuenta de los trabajos de esta empresa, que para el año 2010, era una de las primeras en ingeniería estructural en unirse al compromiso AIA 2030. Esto se trata de reconocer que los edificios son el mayor contribuyente de gases de efecto invernadero, por lo que se hacen esfuerzos para crear edificios sostenibles y con cierta eficiencia energética.
Entre sus obras destacan: Soldier Field en Chicago; Petco Park en San Diego y la Biblioteca Pública de Mineápolis. Torres Petronas de Kuala Lumpur en Malasia. Thornton Tomasetti ha colaborado con arquitectos de renombre, entre ellos: César Pelli, Santiago Calatrava, Renzo Piano y Rafael Viñoly.
En lo que concierne a la construcción, esta estuvo a cargo de Samsung C&T Corporation, empresa de construcción e ingeniería de Corea del Sur; fundada en el año 1938. Fue la primera empresa de Samsung que inicialmente estuvo involucrada en operaciones de construcción y comercio exterior.
7 Datos interesantes
Ícono de Taiwán
El sureste de Taiwán quedó conmocionado por un terremoto de 6.9 grados el 18 de septiembre del año 2022. Pero el rascacielos Taipéi 101 no sufrió daños y quedó comprobado que puede resistir este tipo de catástrofes gracias a un amortiguador de masa que es capaz de estabilizar el edificio completo, sin que sufra ningún tipo de daño ante fuertes vientos u otros sucesos que podrían poner en riesgo la seguridad del bloque.
Resistencia comprobada
Taipéi 101 tiene un sistema de contrapeso diseñado para soportar vientos de 150 kilómetros por hora y terremotos de 7 grados. Tiene este amortiguador con una masa de 728 toneladas y un diámetro de 5,4 m. Ayuda a estabilizar el edificio en situaciones con fuertes vientos y terremotos. Está compuesta enteramente por placas de acero y está instalada entre las plantas 87 y 92 del rascacielos.
Por todo lo alto
Taipéi 101 pertenece al selecto grupo de los rascacielos más altos del mundo. Entre ellos también están: Chow Tai Fook Centre, el One World Trade Center, el Goldin Finance 117, el Ping An Finance Center, las Torres Abraj Al Bait, la Torre de Shanghái y el Burj Khalifa.
Todoterreno
Taipéi 101 es un rascacielos de estructura posmoderna, en el cual se utilizan tres diferentes tipos de acero y un concreto reforzado que le da fortaleza al edificio, para poder así resistir un tifón y, al mismo tiempo, ser lo suficientemente flexible para resistir un sismo. Eso sin contar que las vigas y columnas del edificio están cubiertas por una espuma ignífuga que ayuda a la resistencia a altas temperaturas en caso de un incendio.
Todo lo que sube tiene que bajar
Los ascensores, fabricados por la empresa Toshiba, poseen un sistema de sellado hermético, muy similar al que usan los aviones, para evitar molestias en los oídos a las personas que viajan en él. La torre posee 61 ascensores. Velocidad del ascensor: 16.83 metros/segundo.
Cuestión de altura
Altura desde el suelo hasta el tope estructural: 502 metros (superó la marca que antes ostentaban las Torres gemelas Petronas con 452 metros). Altura desde el suelo hasta la azotea: 448 metros (superó la marca que antes ostentaba la Torre Sears con 443 metros). Altura desde el suelo hasta el último piso ocupado: 438 metros (superó la marca que antes ostentaba la Torre Sears).
Ahorros significativos
Taipéi 101 tiene un ahorro anual de CO2 de 2,995 toneladas, que equivalen a evitar la deforestación de más de cuatro hectáreas de bosques o el uso de 239 coches al año. Según los cálculos de expertos, se ahorran 28,000 toneladas métricas de agua y se dejan de producir 1,261 toneladas métricas de basura al año.
Construmedia